lunes, 22 de julio de 2013

Crónica de Los Coronas en el BluesCazorla 2013.

Blues Cazorla es uno de los principales festivales de blues y rock que hay a nivel internacional, dura tres días y se sitúa en el pequeño pueblo jienense de Cazorla, en el que se dan cita grandes artistas de este estilo. Sé que este festival no necesita presentación aunque a nivel de rock nacional parece que está un poco olvidado, pero es un festival maravilloso en el que el pueblo entero se vuelca y se convierte en una gran fiesta durante tres días donde se puede disfrutar desde bien temprano de conciertos gratuitos al aire libre, y por la noche ya "con la fresquita" como se dice en esta zona, los grandes grupos. Como punto criticable de este gran festival de tres días son los precios poco populares de su entrada (entre 60 y 75 euros) y la ausencia de una zona de acampada para acoger a la gran cantidad de gente que hay, muchos de ellos, familias con niños. Como cabeza de cartel, no escatimaron en grupos, el más aclamado: George Thorogood & Destroyers, que tuvieron un sonido espectacular, sin embargo, en este humilde blog, nos centraremos como siempre en el producto nacional: Fito y los Fitipaldis y los Coronas a quien os traemos en esta primera entrega.


Para quien no los conozca, Los Coronas son grupo de rock instrumental que con su particular estilo ha recorrido los escenarios de medio mundo y que vino a presentar su último trabajo "Adiós Sancho" que vio la luz hace tan solo unos meses. Pero antes de hablar, me pongo en antecedentes, y es que en el rato previo al concierto, mi pregunta era la siguiente: ¿cómo voy a hacer una crónica de un concierto de un grupo instrumental?, algo que me parecía a priori una labor complicada. Pero no, no podía estar más equivocada, y es que tengo que decir que lo supe desde que los 5 componentes de los coronas pusieron los pies en el escenario, y es que en cualquier grupo de música hay dos puntos que tienen que ser importantes: uno es por supuesto la música, las canciones y el llevarlo bien al directo; el otro es el estilo, arte y maneras en un escenario, de eso que ves a un Rock Star trabajando duro, pero sin que aparentemente le esté costando mucho hacerlo, porque tienen porte, presencia en un escenario y mucho arte. Y eso amigos, es algo que tienen pocos grupos, y a Los Coronas les sobra.

Con esa mezcla de rock añejo con aires de western, que solo ellos saben mezclar con el pasodoble más castizo consiguieron meterse en el bolsillo a toda la gente que estaba presente, nadie pudo resistirse al espectáculo que se estaba dando no solo en el escenario, ya que en algunas ocasiones hubo momentos en los que parecía que se rompía esa barrera invisible que hay entre el público y el escenario. Y es que los músicos de esta banda son realmente interesantes, con unos ritmos a lo Tarantino, mientras que gran parte del peso melódico lo llevaba la trompeta que le da un toque muy personal . Además, en todo momento fueron realmente comunicativos e interactuaron con el público, de manera que se propusieron demostrar y demostraron que:
  • A pesar de ser un grupo instrumental, Los Coronas también pueden hacer canciones con letra, y es más el baterista el encargado de hacerlo, algo no muy común.
  • Que se puede tocar los "ramones" con el baterista en pie.
  • Y que todo lo que se hace en España, se hace antes en Ucrania.

Otro punto destacable del concierto vino con la mezcla en muchos momentos del rock mas surfero con el pasodoble (ese gran Paquito el chocolatero ucraniano) e incluso tocando algún temita clásico para hacer cantar al público (por ejemplo "Corazón contento" de Marisol, que me llegó al alma, o "Day tripper" de los Beatles, que terminó de conquistarme). Para acabar un una petición de ayuda: apoyar a las bandas, a los grupos que tocan en garitos, a la música en directo y a la cultura.

En definitiva un concierto al que fui sin saber lo que iba a ver, muy sorprendente, divertido que hacen bailar y cantar a la gente, mucho más que a otros con más nombre. Muy grandes y muy recomendables Los Coronas.

Ya como crítica final, y sin ánimo de polémica, decir que me pareció muy acertado un concierto como este en una plaza de toros lo que le dio un toque aún más particular a la actuación, pero creo que tanto esta plaza de toros como las del resto del país deberían ser usadas solo para eso, para hacer conciertos, y si son de los Coronas, mejor.

Miriam Rodríguez Lirio.

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